El género romance, en literatura, se ramifica hasta ofrecer tantas historias de amor como gustos y exigencias existen. Uno de los autores que tiene su posición privilegiada entre las historias de amor modernas, es el italiano Federico Moccia. Sus libros tienen una alta dosis de romance, por supuesto, pero también de dilemas típicos que suceden en las relaciones de parejas desde la infidelidad, la amistad como una influencia en la manera de encarar al amor y el constante anhelo de ser feliz.
Su primer libro Tres metros sobre el cielo, fue editado por una pequeña editorial en 1992 pero hasta que no se lanzó una nueva edición en el 2004, no se convirtió en un absoluto éxito de ventas, siendo traducido a varios idiomas y ocupando los primeros puestos en toda Europa, Brasil y Japón. Una vez que su nombre se consolidó, fue cuestión de publicar nuevos títulos para lograr inmediatamente el reconocimiento del «fenómeno Moccia», como se conoce el interés que despiertan sus novelas. Tengo ganas de ti, perdona si te llamo amor, Carolina se enamora, Perdona pero quiero casarme contigo, esta noche dime que me quieres, son algunas de los títulos que conforman su obra y que habitan en librerías de todo el mundo con sus respectivas traducciones.
Las novelas de Moccia se caracterizan por tener una narrativa muy visual, probablemente por el pasado del escritor como guionista, cuyas construcciones de diálogos e imágenes deben estar pensadas para ser proyectados en una pantalla. No hay una profundidad ni en lenguaje, ni en los personajes, dos elementos que podrían ser puntos críticos contra el autor pero que él busca recompensar con diálogos veraces e historias de amor que cumplen con lo que un lector contemporáneo del género exige. Al buscar historias de dos personas ajenas que se encuentran, en puntos de su vida diferentes y cómo el amor triunfa sobre todo, son las características que Moccia aprovecha para contar historias.
Si bien este es un género que dominan las mujeres, Moccia se ha sabido ganar a los lectores con historias que lo llevan a introducirse en la sensibilidad de hombres y mujeres en romances, de manera superficial sí, pero romance al fin. No muy amigable para los que buscan historias más complejas y profundas pero un autor que no puede ser apartado cuando se trata de lecturas de amor que aportan entretenimiento puro al lector.
En Exedra Books tenemos Perdona pero quiero casarme contigo, Carolina se enamora y Esta noche dime que me quieres